Entrevista de Régis Bonvicino al poeta cubano Pedro Marqués de Armas
Julio de 2008
Régis Bonvicino: ¿Usted cree que Raúl Castro hará una transición hacia la democracia en Cuba, con la autorización legal para la fundación de partidos políticos?
Pedro Marqués de Armas: No creo en esa posibilidad. La lógica del sistema totalitario cubano es, y seguirá siendo, exclusivamente política. Una vez muerto Fidel Castro, lo más seguro es que Raúl propicie algunos cambios económicos tangibles (hasta ahora sólo se han efectuado movimientos en falso), pero aumentando a la vez el control y la represión. Si esos cambios implicaran riesgos para la sobrevivencia del sistema, ahí mismo se verán limitados. Una transición hacia la democracia sólo parece posible tras la desaparición -por las causas que sean- de los hermanos Castro, esto es de quienes encarnan el biopoder cubano.
RB: ¿El nuevo presidente de los EE.UU –sea Barack Obama o McCain- tendrá un papel decisivo en esta transición?
PMA: Creo que el papel decisivo en una transición hacia la democracia en Cuba deberían tenerlo los cubanos. Cuando está en juego un desastre de medio siglo, deben ser los propios actores de ese desastre quienes echen a andar el proceso de reconciliación nacional. Esto implica que se reconozcan públicamente los crímenes y el sufrimiento infligido a la gente, y a la vez que se concreten las demás libertades y se hablen diferentes lenguajes. El papel de Estados Unidos y de Europa es en cualquier caso importante en términos políticos, económicos, humanitarios, etc., pero no debería ser, en modo alguno, protagónico. En este sentido, es preciso que la reconciliación también sea una negociación hacia afuera, lo más sólida posible, es decir el replanteo de la soberanía en un contexto democrático.
RB: ¿Existen partidos políticos cubanos en los múltiples exilios?
PMA: Existen partidos y numerosas organizaciones políticas en todos los exilios cubanos: EE.UU, España, Francia, Suecia, etc. Por ejemplo, Unión Liberal Cubana, Partido Demócrata Cristiano, Coordinadora Social Demócrata de Cuba, Directorio Democrático Cubano, Partido de Renovación Ortodoxa, The Cuban American National Foundation, entre otros
RB: ¿Es posible que se funde un partido socialdemócrata en Cuba, si en la isla no hay obreros?
PMA: Dentro de Cuba existe desde hace más de una década un partido social demócrata, el cual tiene extensiones por todo el país. Y hay, además, múltiples organizaciones obreras, al margen de este partido. Supongo que no tienen mucho alcance, ahora mismo, dadas las condiciones. Pero lo que está claro es que frente a la inevitable avalancha neoliberal que nos tocará en suerte o desgracia dentro de algunos años, es importante que exista una izquierda fuerte, capaz de enfrentar los nuevos retos sociales, más si se tiene en cuenta que estamos hablando de medio siglo sin experiencia sindical, con una cruenta dependencia del Estado, sin moral de trabajo, etc.
RB: ¿El hecho de que Yoani Sánchez no haya sido autorizada a salir de Cuba para recibir el premio Ortega y Gasset de periodismo es síntoma de que los intelectuales y artistas continúan censurados y perseguidos?
PMA: Por supuesto, continúan. El régimen cubano siempre se ha permitido meter el hocico en la vida de aquellos escritores, artistas, e intelectuales que pasan la raya o que simplemente coquetean con ella. De hecho, todos son controlados. Yoani la pasa ampliamente y, además, con ideas muy claras, convincentes. Por eso no la dejan salir; por eso le bloquean la página; y por lo mismo el propio Fidel Castro hociquea sobre ella, con todo lo que eso supone. Pocas cosas más horribles, dijo Foucault, que el poder de descalificación dentro de un sistema totalitario.